Después del afeitado, la piel es más sensible y más expuesta a irritaciones. Por eso, un buen ritual de afeitado no se termina nunca con la mera acción de afeitar. Si tienes tiempo y quieres disfrutar de unos cuidados más profundos, te proponemos la preparación de un agua aromatizada que te dejará una sensación de frescor e hidratación después del afeitado.

La preparación es muy simple. Se trata de preparar un agua aromatizada con 500 ml de agua filtrada y una mezcla de hierbas aromáticas y medicinales con propiedades antisépticas, antiinflamatorias y relajantes. El proceso es el mismo de una infusión: colocas 4 cucharadas de hierbas secas (puedes utilizar uno o mezclar varias) en un cuenco y añades agua hirviendo. Tapas y filtras al cabo de 10 minutos.

A continuación te proponemos algunas plantas útiles para este tipo de tratamiento aftershave:

Lavanda: destaca por sus principios activos calmantes, antisépticos y cicatrizantes. Es perfecta para restablecer el equilibrio de la dermis y actúa sobre pequeñas heridas o irritaciones debidas al contacto con la navaja o la máquina de afeitar.

Manzanilla: muchos lo desconocen, pero el efecto calmante de la manzanilla actúa a nivel tópico, por contacto. La aplicación de un preparado a base de manzanilla sobre la piel irritada haráafeitado, ecoherbes que mejore muy rápidamente la sensación de picor. En general ayuda a calmar la piel y a que recupere fácilmente su aspecto normal.

Tomillo: su aroma mediterráneo dará un toque refrescante a tu ritual de afeitado. Además es una planta con excelentes propiedades antisépticas y antifúngicas y ayuda a prevenir la formación de granitos además de tonificar la piel.

Caléndula: si tienes la piel especialmente sensible, la flor de la caléndula no puede faltar en tu receta para después del afeitado. Esta planta posee propiedades cicatrizantes y emolientes, ideal para calmar el picor e hidratar.

Cómo aplicar el agua aromatizada para afeitado

Después de afeitar y remover delicadamente los residuos del jabón, aclara y seca suavemente la piel. Coge una gasa limpia y empápala con el agua aromatizada filtrada y fría. Aplícala sobre la piel del rostro tamponando ligeramente.

Si tienes un poco de tiempo a disposición, puedes tomar el momento aftershave con más calma. Moja una toalla pequeña y limpia con la infusión de hierbas y escurre el exceso de agua. Siéntate o acuéstate cómodamente y aplica la toalla sobre la cara cubriendo bien toda la superficie. Relaja y deja actuar al menos 10 minutos.

Después de la tonificación con el agua aromatizada puedes aplicar un poco de crema hidratante, te dejará una sensación de piel suave y limpia por más tiempo.

¡Un poco de relax y mimos, de vez en cuando nos lo merecemos todos! ¿Ya has reservado unos minutos extra para tu próxima sesión de afeitado?